11 de noviembre de 2013

Ascenso


Hitler: El reinado del mal (2003) es una muy interesante película sobre el ascenso del nazismo en Alemania. Adolf Hitler es encarnado por un excelente y casi irreconocible Robert Carlyle.

El guión y las imágenes están muy bien fundamentadas en fotos de la época y documentos históricos.

En el aspecto íntimo de la trama se destaca el papel un señor no muy recordado: Ernst Hanfstaengl, un personaje con muchas influencias en la alta sociedad del Munich de la época y cuyo aporte fue fundamental para encumbrar a quien en sus inicios no pasaba de ser un curioso personaje de origen austríaco metido en política.

Tal vez no aporte mucho a aquellos conocedores de la historia del nazismo pero es muy didáctica para los que no están al tanto de la evolución de aquel movimiento/partido revolucionario alemán que conmovió Europa y el Mundo entero.

Aclaro que no digo que el nazismo fue "revolucionario" en tono elogioso, solo para remarcar que ese concepto no suele tener mucho de positivo en la historia de la humanidad.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Una serie buenísima y altamente recomendable.

TRESLETRAS

Blas dijo...

Que lo "revolucionario" sea bueno es una deformación mental occidental generada por la revolución francesa.
Si se estudiara una historia mas o menos aseptica la palabra revolucionario tendria mas connotaciones negativas que positivas.

BlogBis dijo...

Lo revolucionario por sobre lo conservador es un mito progre.
Salvo la Revolución Norteamericana todas las demás terminaron en estrepitosos fracasos que cristalizaron en gobiernos despóticos o totalitarios. Incluído el fenómeno de las revoluciones independentistas latinoamericanas.

Sine Metu dijo...

Para opinar sobre las declaraciones de Duran Barba, creo que Hitler y Chávez sí son comparables. La diferencia es que Hitler tuvo en su momento la posibilidad de ser fulimnante. Chávez duró más tiempo y su herencia no se habrá extendido como la de Hitler, pero será más destructiva en el largo plazo seguramente. Hitler tiene más muertos, Chávez más víctimas.

Anónimo dijo...

Como opositor al gobierno de turno, atacaba a la democracia que no le daba los numeros y atacaba a la republica cuando sus instituciones (corte suprema, parlamento, ejecutivo) decidian distinto a sus deseos. Cualquier parecido con la actualidad argentina es pura coincidencia.