Dead Man Walking: Abdelmajed Abdel Bary. ACTUALIZADO: NO CAMINA MÁS, LO VAPORIZARON A BOMBAZOS

Publiqué este post el 25 de agosto de 2014 pronosticando que esta basura degolladora no iba a durar mucho porque lo iban a cocinar a bombazos. Me equivoqué, los americanos demoraron más de un año en vaporizarlo a misilazos en Libia el día anterior al ataque terrorista en París. La magnitud de la tragedia entre inocentes, opacó la buena noticia de que Bary estaba cocinándose en el infierno en minúsculos pedacitos.

La tragedia de París ha merecido todo tipo de análisis y comentarios, pero Arturo Pérez Reverte ha expuesto un punto de vista que vale la pena compartir:   

 http://www.huffingtonpost.es/2015/11/15/atentados-paris-reverte_n_8568440.html?1447603022

Basura islámica seudo inglesa

Con ese puñal asesinó a James Foley

Desde que publiqué mi primer post sobre el avance del ISIS en Irak y Siria, los acontecimientos se precipitaron de tal manera que superaron cualquier intento de actualizar el post ya que el grupo terrorista ocupaba las primeras planas de los medios de prensa internacionales, y hasta en los de la Argentina que suelen darle poco espacio a lo que ocurre lejos de nuestra estrecha mirada localista.

Mientras el ISIS se limitaba a masacrar sirios de Assad o a otros árabes de cualquier especie avanzando sin cesar en su ocupación de territorios, el público del Occidente le prestó poca atención con la excepción de los especialistas en temas de política internacional, incluyendo periodistas, y espero, de los expertos en terrorismo islámico de los respectivos Servicios Exteriores y de Inteligencia de los gobiernos del Primer Mundo y de los países directamente involucrados, aunque sus análisis y previsiones no se hayan hecho públicos.

La persecución a cristianos, a yazidíes y las brutalidades cometidas por el ISIS contra sus prisioneros han sido fundamentales para que la prensa se preocupe de estos islamistas y el asesinato (no cabe decir ejecución) y decapitación del periodista James Wright Foley ha sido la última salvajada que ha conmovido a la opinión pública mundial. 

Los servicios de inteligencia británicos parecen haber podido identificar perfectamente al asesino de Foley: un tal Abdelmajed Abdel Bary, quien se había hecho ya notorio por una foto que subió a Internet sosteniendo la cabeza de un enemigo, y que ahora mató a Foley. 

Sé perfectamente que no hay maneras elegantes de matar a alguien en una guerra, pero matar a sangre fría degollando a un prisionero inerme que SABE lo que le va a ocurrir, es una forma absolutamente cruel y sádica de matar, sobre todo si lo hace el muy hijo de puta asesino serruchándole el cuello como lo hizo con Foley. 

No es casual este método de matar, es totalmente deliberado para infundir terror, así como lo fue toda la puesta en escena del video desde el uniforme naranja de la víctima, tipo Guantánamo, el puñal corto con el que iba a ser asesinado, la no exhibición del momento de la decapitación completa con el chorro de sangre que habrá saltado al cortar la yugular y las carótidas; y hasta el acento británico del asesino que fue útil para reclutar más fanáticos en las Islas, y también para sembrar el pánico entre los británicos no musulmanes muchos de los cuales van a segregar más aún a los hijos de Alá profundizando "las contradicciones del sistema", como diría un bolche.

El hecho de que el asesino con acento inglés mate a cuchillo me parece además significativo. Este tipo Abdel Bary nació en una ciudad de Inglaterra, fue educado y se movió entre ingleses y vivíó cómodamente y hasta era relativamente exitoso como rapero, pero era un evidente resentido. 

Como cualquier habitante urbano de una ciudad moderna europea o americana, el Abdel supongo que en su perra vida usó un cuchillo para matar un pollo, una oveja o cordero para comer sino que los compraría en el supermercado o en la carnicería halal de su barrio. Muy distinto es el caso de cualquier pastor o campesino árabe, musulmán o cristiano, que crezca en un pueblito iraquí o sirio donde usar el cuchillo para matar animales, o defenderse llegado el caso, es habitual.

Piénsenlo en términos argentinos, ¿cuántas personas conocen que vivan en una gran ciudad que hayan matado a cuchillo alguna vez un pollo o una gallina, ni hablar de una vaca o cordero? Pocas, imagino. En cambio, si hubieran nacido o criado en el campo conocerían muchísimas e incluso es muy posible que habrían matado alguna gallina Uds. mismos. Trasládenlo a la super educada Europa Occidental donde, salvo en España, Portugal o Grecia, si los de la ciudad llegan a ver sangre se mueren de un infarto la mayoría de los habitantes.      

El asesino Bary al degollar y decapitar gente rompió con las barreras culturales europeas y esto tuvo un gran impacto en la gente común y corriente que se estremeció de horror al pensar que uno de ellos se había convertido en un salvaje sanguinario. Parecería que la memoria es corta en Europa porque hace apenas 75 años, sus países se ocuparon de amasijarse salvajemente en una escala nunca vista y de todas las maneras posibles, para no mencionar la lucha de la guerra étnica de los Balcanes, que fue hace apenas 20 años, donde el cuchillo, el garrote, y la violación de todo derecho humano fue moneda corriente de todos los bandos.

Tal vez haya sido por esa razón que, consciente o inconscientemente, los servicios de inteligencia británicos se lanzaron inmediatamente a identificar al supuesto british ya que temerían que fuera un rubio de ojos azules, como algunos que se han convertido al Islam. Debe haber sido algo tranquilizador determinar que se trataba de otro árabe más al que le afloró el "salvaje".

El animal de Bary me parece que tiene otra característica psicológica interesante que lo convertirá rápidamente en un Dead Man Walking: quiere sobresalir y destacarse y que se sepa que es un fiel seguidor duro y recio del Profeta. 

La explicación parece simple si uno ve las fotos del físico y de la cara del infeliz ése: es una piltrafita con hombros de tísico y feo al que ninguna rubia le debe haber dado ni cinco de pelota. Pero como se crió en Occidente y conoció cierta fama, no pudo dejar de contaminarse con el deseo narcisista de ser reconocido y valorado por sus pares fanáticos y, al mismo tiempo, vengarse públicamente de los desdenes reales o supuestos que debe haber experimentado en Inglaterra. 

Sus jefes del ISIS deben estar encantados de contar con un imbécil semejante que se presta a asesinatos infames y que es totalmente descartable ya que no tiene raíces tribales en Irak ni en Siria ni lealtades de clan o de familia y, al mismo tiempo, por ser europeo de nacimiento sirve de cartel de reclutamiento para otros fanáticos del mismo origen. 

Dado que el asesino Bary dejó tantos rastros por causa de su ego que hasta la Bonaerense lo podría encontrar, es seguro que pronto se convertirá en un mártir y lamento decir que probablemente se lo carguen de un bombazo, lo que me parece una muerte demasiado rápida y piadosa para este abyecto ser. Mucho mejor sería un tiro en el hígado o en los intestinos y darle mucha agua para aplacar su sed, Inch Allah.         

Por otra parte, el ISIS es, sin duda, un grupo terrorista islámico que ha demostrado ser muy especial: tiene un alto grado de entrenamiento militar y de combate; está integrado por fanáticos sunníes provenientes de todo el mundo islámico de los países árabes, de Chechenia, de Afganistán, de Pakistán y, oh sorpresa, también por tipos nacidos en Europa; también lo componen iraquíes sunníes (muchos de ellos oficiales y soldados veteranos de Saddam) que se hartaron del maltrato del gobierno chiíta de Bagdad; tiene fuentes de financiamiento muy importantes que no provienen solamente de robos, saqueos, impuestos y extorsiones sino que parece muy factible que, por su magnitud, haya recibido ingentes fondos de Arabia Saudita y Qatar, especialmente en sus inicios de la lucha contra el régimen de Assad.

Pero el ISIS corre el peligro de ser víctima de su propio éxito y crecimiento explosivo en poco tiempo. Su líder es un iraquí sunní con una larga historia de duro resistente a la invasión de EE.UU. y quiere establecer un Califato salafista extremo borrando las fronteras nacionales desde España hasta el Golfo Pérsico y esto no es del agrado de ninguna monarquía reinante árabe por muy religiosos que sean.

Asimismo, el éxito del ISIS al reclutar para sus filas no solamente a iraquíes o sirios sino en atraer extremistas fanáticos desde países lejanos de Europa, de Libia, Egipto, o aún más lejanos como Pakistán, Afganistán y Chechenia, está superando los lazos de sangre de las distintas tribus árabes de Irak y Siria que están emparentadas a su vez con las del Golfo Pérsico.  

Me olvidé de aclarar que tantos los afganos como los pakistaníes también se rigen por vínculos tribales desde tiempos remotos y que, en algunos casos, esos lazos unen clanes de los dos lados de la frontera pakistaní-afgana, pero estas tribus no tienen ninguna vinculación familiar con las de los árabes, sólo los une el fanatismo religioso.   

Por otra parte, los musulmanes europeos de segunda o tercera generación que se han sumado a las filas yihadistas del ISIS, tienen vínculos más débiles con sus orígenes tribales y tienden a una mayor radicalización religiosa que prescinde de los viejos lazos de clan y los hace más peligrosos aún.

Todos estos factores de alguna manera novedosos, y que recuerdan a la actitud de los salafistas de Libia que produjeron un caos al derrocar a Kadaffi, pueden contribuir a que, a la larga, el ISIS sea combatido ferozmente por aquellos gobiernos (Qatar, los Saudítas) y grupos como Al Nusra de Al Qaeda que los apoyaron inicialmente y terminen provocando una eventual caída del ISIS.
    

Tanto en Irak como Siria, la pertenencia a una tribu, a un clan de la misma y a una familia de ese clan es un factor absolutamente determinante que supera, en algunos casos, incluso la barrera entre chiítas y sunníes. 

Así vemos que en Siria gobierna Assad que es chiíta, pero de una secta muy especial, la Alauita, que no practica el mismo rito que sus cófrades iraníes, y los Alauistas difieren bastante del dogma mayoritario chíita. Obviamente, lo apoyan las tribus chiítas sirias y la todavía influyente minoría siria cristiana, pero también cuenta con el apoyo militar de tribus sunníes sirias que mantienen alianzas históricas con los Alauitas y con los remanentes del Partido laico Baath.

Algo semejante pasa en Irak donde hay más de 47 tribus entre sunnitas y chiítas y no todas son aliadas en la misma creencia sino enemigos mortales desde tiempos inmemoriales. También había tribus sunnitas que no tenían problemas con algunas de las chiítas hasta que la política sectaria suicida del Primer Ministro chiíta Malik, al marginar a los oficiales militares sunnitas y menoscabar la vida de los ciudadanos sunnitas del Norte de Irak, los fue arrojando literalmente a los brazos del ISIS, sobre todo al comienzo de la ocupación de territorios donde no habían mostrado aún su salvajismo y rigurosa aplicación de la Sharía.     

El Ejército iraquí del Norte, dirigido por oficiales chiítas que habían reemplazado a los oficiales sunnítas al frente de soldados de esta última creencia, se desintegró rápidamente de una manera escandalosa por la falta de conducción y de lealtad de las tropas. Le dejaron al ISIS un botín de guerra moderno y cuantioso que incrementó su fuerza militar.

Recuerdo haber leído que cuando las tropas del ISIS ocuparon la ciudad natal de Saddam Hussein, Tikrit, aparecieron numerosos carteles con la imagen del Saddam ya que sus habitantes eran de la misma tribu del Dictador, eran Tikritis que constituyeron el mayor contingente de militares y funcionarios más leales a Saddam.

También los del ISIS se están olvidando la fuerza del sentimiento nacionalista de Irak y de Siria, que posibilitó en el pasado, desde 1947, el surgimiento del otrora poderoso Partido Nacionalista Panárabe Laico y "Socialista" Baath que dominó la escena política de la región durante muchos años y que contaba con filiales fuertes en Jordania, Egipto, Túnez, Libia, Yemen y Líbano.

Los americanos también están empezando a decidirse a ponerle freno al ISIS, pero como suelen hacer en los últimos 15 años en la zona, van a actuar a destiempo, mal y confundiendo siempre el problema de fondo por cuestiones principistas.

Unos cuantos bombardeos en Irak contra el ISIS no lograrán gran cosa si no son acompañados de una ofensiva terrestre con tropas, que el payasesco gobierno de Bagdad no puede juntar ni por asomo ya que un rejunte de milicianos o civiles apresuradamente reclutados NO es un Ejército sino una chusma armada por valiente y motivada que sea. Sin tropas y oficiales sunnitas, que eran mayoritarios en el Ejército de Saddam, no van a hacer mucho y esos oficiales o están muertos o están con el ISIS o esperando en sus casas a ver qué pasa, junto con otras muchas tribus sunnitas que no ven con demasiado entusiasmo al ISIS por su dureza religiosa que es mala para los negocios...

Y si los EE.UU. atacan al ISIS en Siria, le darían una mano a Assad, que era la bestia negra de Obama hace un año, e indirectamente apoyarían a Irán y a Hezbollah... Se meten solitos en unas trampas los yanquis que no se puede creer. 

Al mismo tiempo, todo el bloque Republicano le está pegando con un fierro a Obama porque no actúa decididamente contra el ISIS y aparecen fósiles hijos de puta como Donald Runsfeld, el De Vido americano de Dick Cheney y el mamarracho irresponsable de Paul Bremer que, con su decisión de disolver en el 2003 al Ejército de Hussein, única fuerza organizada que podía mantener el orden si se la sabía manejar con inteligencia, arrojó a la resistencia iraquí a expertos oficiales y soldados veteranos que incrementaron los ataques contra los soldados de EE.UU. causándoles más de 4.000 muertos e innumerables heridos y el dispendio de miles de millones de dólares de los contribuyentes americanos.

Les recuerdo que la joyita de Cheney con su compañía Halliburton hizo negocios en Irak por valor de 39.500 millones de dólares y, con su capitalismo de amigos, les hizo ganar a un pequeño grupo de empresas otros 37.000 millones, además de que llenó Irak con 14.000 contratista privados y más de 5.000 guardias de seguridad que contribuyeron poderosamente a ganarse el odio de los iraquíes de a pie.

No puedo evitar pensar que este súbito interés de los muchachos republicanos y sus amigos de uniforme no está motivado solamente por razones humanitarias ni para joderlo políticamente a Obama con su famosa retirada apresurada dejando una fachada de gobierno democrático en Bagdad, sino por el más puro espíritu de codicia de seguir ganando guita. Los Kurdos, con sus milicias Pershmergas, no cuentan con material pesado moderno de combate para enfrentar al ISIS y se lo están reclamando al gobierno de EE.UU. para poder estar en condiciones mínimas de frenar al ISiS. Por supuesto, sería el gobierno americano el que debería hacerse cargo del costo del suministro del equipamiento y del entrenamiento a los peshmergas para su uso eficaz. Los kurdos tienen varios campos de petróleo en Irak y, quizás, podrían emplear petróleo como forma de pago compensatorio. 

Para más Inri y agregar confusión, el PKK, grupo guerrillero Kurdo de filiación marxista que peleaba contra los turcos para obtener la independencia de su gente y que está en la lista de grupos terroristas elaborada por EE.UU., también opera en la zona de los Peshmergas contra los del ISIS y quiere su tajada de ayuda americana...  

Una última cosa, es evidente que para la prensa internacional la persecución y padecimientos de los 200.000 yazidíes fueron noticias mucho más importantes que los similares padecimientos de cerca de 500.000 cristianos. 

Lo digo porque durante más de una semana casi no apareció ni una línea sobre el destino final que habían tenido los refugiados cristianos. Recién ayer nos enteramos que el Papa envió 1 millón de dólares de  fondos vaticanos para asistir a los refugiados cristianos que habían llegado a la zona kurda controlada por los Peshmergas... Ser cristiano no vende titulares parece.

Pick ups Toyota al servicio del ISIS  

Caravana de Toyotas y Nissan del ISIS yendo al frente de combate

¡Cómo te equivocaste Bush al invadir Irak y encima mintiendo a sabiendas! Mirá que te lo advirtieron hasta el cansancio Chirac en Francia y Hellmuth Schröeder en Alemania. Vean los diarios de la época y verán cuánta gente preveía en esos tiempos que se iba a incrementar el terrorismo islámico, pero ni pelota les dieron.