Estuve hace poco en Orlando, Florida, visitando los parques de atracciones. Anduve también por Miami y me llamó la atención que los precios de los productos en los supermercados me parecían carísimos. Fácilmente casi el doble de precio de lo que tienen productos similares en Madrid teniendo en cuenta el tipo de cambio. Me dijeron amigos de Argentina que para los argentinos no es lo mismo y que muchas cosas son hasta más baratas que en Buenos Aires. Increíble.
Aparte de esto merece contar un breve diálogo ocasional que mantuve con una argentina originaria de La Plata que estaba de viaje por ahí. Luego de contarme de los numerosos viajes por Estados Unidos y Europa que había hecho con su familia me dijo que estaba muy decepcionada con Macri. Principalmente se quejaba de la suba de las tarifas de los servicios. Por ejemplo el gas le había pasado, según me contaba, de $50 a $500. En fin, fue realmente impresionante tener frente a mí este tipo de mentalidad lamentablemente bastante difundida y que muchas veces hemos discutido en este blog.
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9 comentarios:
Lo noto cada vez que hablo con un pariente, amigo y/o conocido en Argentina. Es muy llamativo. La sensación que me queda es que se hizo muy carne que las tarifas de los servicios públicos las deben pagar los demás y que el gobierno debe seguir planchando el tipo de cambio para subsidiar los viajes y las compras en el exterior. En otras palabras, hay que seguir con el populismo para la clase media extendida que tantos éxitos le deparó al matrimonio Kirchner.
Mentalidad de cabecita de termo.
Nada que agregar.
Bienvenido de regreso Jorge! Extrañaba tus posteos.
TRESLETRAS
apesta ese tipo de gente
pack de tres latas de atún en BCN, 1 euro con 10.
Lata de atún berreta en BUE 35 pesos
Ojo que la "decepción" con Macri viene más por el lado de que el ajuste de los privados no se correpondió con el ajuste de la política (Basta ver a Piter Robledo viajando por NYC y las coordinaciones y subsecreatrías nuevas que se crearon)
Últimamente los gobernantes de "derecha", se han vuelto cada vez más socialdemócratas, creando más aparataje público o no reduciendo el que no es más que burocracia inmovilista.
Por acá don Sebastián persiste en mantener ciertas líneas legislativas propias de la izquierda.
Al final de cuentas, el gran drama de los argentinos es la brecha que existe entre sus humos y sus ingresos. Una pena.
Es que muchos argentinos son así. Quieren la fiesta y que la pague el vecino. Es cierto que la política se ha ajustado poco pero todo se ha ajustado poco, entre otras cosas porque nadie quiere ceder nada y casi todos de una u otra manera estamos beneficiados por los regalos del kichnerismo que se fumó toda la inversión de los 90 más los precios extraordinarios de los commodities de los 00. Estoy en San Martín de los Andes, el estado de las rutas es lamentable más allá de que hay muchas obras en curso y unos pocos tramos en condiciones, donde todavía no hay intervención los pozos son tan comunes como en las calles de Rosario. Robaron mucho, pero la gestión fue el verdadero desastre del matrimonio del sur
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