Parece un lugar común, pero es absolutamente cierto que Internet achicó el mundo, y permitió cosas fantásticas. Conocer a un tipo por lo que escribe, entrar en sintonía, forjar algo muy parecido a una amistad sin siquiera haberse visto las caras.
Ese caso se dió con Luis Gómez, que desde Alemania publicaba su excelente Desde el Exilio, un blog que más de una vez linkeo a novedades de mi sitio, y que se convirtió en una ventana para observar los problemas de España.
La vida, el trabajo, alejan a Luis de su blog. Es una pena, pero es la vida.
Un abrazo. Y sabes donde encontarme, Luisito. Te debo una Quilmes y me debes una Jägermeister.
2 comentarios:
Desde el Exilio era también uno de mis blogs de lectura obligada!
Suerte Luis!
Francisco P
Cuando empezó la internet, creí que la gente se iba a aislar. Incluso escribí poemas al respecto.Me equivoqué. He conocido ha bastantes personas interesantes.
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