17 de julio de 2006

Con Israel

Veo en un post que Marcos se pregunta si el conflicto en Medio Oriente puede leerse desde un punto de vista liberal. Hace ya ¿dos décadas? que en mis años de estudiante, mandé al carajo a todos los que planteaban el liberalismo en términos de laboratorio. Recuerdo una discusión memorable (sé que varios protagosnistas de la misma leen el blog) donde se discutía si era factible privatizar los océanos. Ahí dije basta, no porque el tema no tuviera interés teórico, sino porque derivó hacia una delirante discusión de los método prácticos a emplear para "alambrar" cada parcela, en una fantasía psicodélica que incluyó satélites, sonoboyas, y aviones-espía.
Desde aquella vez creo que abandoné casi totalmente las sutilezas dialécticas y los floreos teóricos. Mises y Hayek con que me alimentaba entonces, no volvieron a ser material de lectura.
Creo que la Argentina está como está -falta de una oposición de derecha seria, y eficiente- por la falta absoluta de criterios prácticos. Nos sobran las fundaciones, los teóricos, los buscadores de argumentos. Falta concreción. Aplicación práctica.


Israel pone en práctica lisa y llanamente el espíritu del Don´t tread on me que preside este blog, respondiendo a una agresión inútil. Hace unos meses expresé que me oponía al disengagement, aquella operación por la que Israel entregó voluntariamente las colonias en Gaza en una actitud que, como dije entonces, significaba absolutamente nada para los grupos islámicos radicalizados. Ahora Israel responde por el fuego una agresión absurda e injustificada. ¿Queda claro que el único lenguaje que reconocen Hamás e Hizbolá es el de las armas.?
Algun trasnochado puede decir que el ejemplo correcto a seguir es el de El Líbano, que en un perfecto lassez faire, dejó crecer a las milicias del Hizbolá. Eso es una sandez como querer marcar las ballenas con sonoboyas, porque en el camino se jugó la seguridad y el bienestar de sus ciudadanos, uno de los pocos objetivos básicos que creo que el Estado debe cumplir.
Y ese es principalmente, el cometido que se ha impuesto Israel, que además verifica uno de los pocos casos en el que la existencia de ése estado, perticularmente, es uno de los principales reaseguros de la seguridad de los judíos.
Por eso, entre otros argumentos estoy con Israel.

(además, porque como señala William Kristol, y recoge Huber, ésta no es una guerra árabe-israelí sino islámico-israelí; y en ese sentido creo que Israel está peleando una batalla que se inició hace siglos, que implica a todo el globo, y cuyo final todavía está muy lejano)

5 comentarios:

Louis Cyphre dijo...

Todos sabemos que la judeofóbia apenas disimulada campea por el mundo y domina diversos ámbitos. Pero una cosa es saberlo en el aire y otra muy distinta es ver como salen a la luz ante situaciones como esta. Sinceramente impresiona.

Tal vez lo que más me sorprende sea escuchar estas cosas de personas que se dicen moderadas, o “liberales”, o de “centroderecha”.

Anónimo dijo...

Hola Ruben

Podes ilustar mejor la diferencia arabe / islamico?
Porque Iran No es un pais arabe?
Ya se son Shii, y ademas Persas?
Gracias
Ramon Cassino

Sine Metu dijo...

Las experiencias liberales se han desarrollado históricamente:

a) instalándose en espacios libres (no quedan más)

b) por la fuerza de las armas.

¿Hay algún ejemplo que sea escepción de estas reglas?

Cuando el no liberal no está dispuesto a respetar al liberal, la única alternativa del liberal es tener armas más poderosas que el no liberal.

Anónimo dijo...

Estos son los estados arabes Por que no esta Iran, no lo se (Tampoco esta Turquia, ni Indonesia, el pais con mas musulmanes). A lo mejor por su composicion etnica, sabe Dios...digo mahoma.

BlogBis dijo...

Sañures, sañures! No confundan!
Árabe es una diferenciación étnica, no religiosa.
Turquía, Indonesia e Irán son países mayoritariamente islámicos , pero no árabes.
La tradición identifica como árabes al tronco racial que desciende de Ismael, hijo de Abraham.

Como contrejemplo, maronitas son árabes pero no islámicos.