"Hace ya unos años que a muchos políticos no se les cae de la boca la palabra "progresismo". La Alianza debía ser el espacio "progresista" por excelencia. Ibarra de presenta a si mismo como el adalid del "progresismo", ocupando el lugar que dejó vacante por fuga la Fernández Meijide, estereotipo perfecto del "progre" nacional.
Desde la llegada de Kirchner a la presidencia se sumó otro componente cuando los Bonasso, Verbitsky Eduardo Luis Duhalde y otros cadáveres insepultos de la política argentina pusieron su afán en intentar promover que lo setentista era por definición progresista, una jugada dialéctica que llegó a calar en nuestra clase media achambonada.En vista al daño que el pensamiento progre ha causado, y por la vaguedad conceptual que este encierra hace falta hacer un análisis casi taxonómico de lo que este implica.
En momentos en que casi no se sabe qué significa ser peronista, ser radical y en que muchos no se animan a definirse de otras maneras -de derecha, por ejemplo- vale la pena que al menos tengamos en claro de qué hablamos cuando hablamos de progresismo. Para ello sirven perfecamente unos párrafos extractados de uno de los textos mas claros escritos en los últimos tiempos en el país: Crítica de las Ideas políticas argentinas, de Juan José Sebrelli:
“Después del derrumbe del “socialismo real” el socialismo de cátedra retorna al anticapitalismo romántico, al socialismo utópico anterior a Marx, al romanticismo antiilustrado con su mitología irracionalista y arcaizante, su idealización de los pueblos primitivos, el rechazo ludista de la sociedad industrial y urbana...”“un sector de la clase media semiculta de los grandes centros urbanos, agrupada bajo la denominación vagarosa de “progresismo”, o también “políticamente correctos”.
Aunque no pueda desconocerse su consagración sincera a las luchas por las libertades, los derechos humanos, la equidad, tampoco deben soslayarse sus serias falencias. Sus principios vagos y contradictorios, mezcla de ingenuidad e hipocresía, de contestación y conformidad con las bogas vigentes y beata devoción por las “buenas causas”, asemejan a los progresistas de hoy a los “idiotas útiles” de los tiempos dorados del estalinismo. Son utilizados, a veces, pero desdeñados por la ultraizquierda y abominados por la ultraderecha, aun cuando todos ellos están unidos por un común nacionalismo y antinorteamericanismo furioso.
Los progresistas inciden en la opinión pública, ya que muchos son profesores, escritores, periodistas, psicoanalistas, artistas, comunicadores sociales, a los que se suman ricos con sentimiento de culpa, o gente exitosa en el mundo del espectáculo, el deporte o los negocios.”
“ Rasgos característicos del progresismo son la confusión entre moral y política, entre moral y economía, el rechazo por toda forma de realismo político, la siustitución de los análisis concretos por la denuncia y la lamentación, el reemplazo de propuestas viables por la sujeción a principios abstractos, a bellos deseos imaginarios, una obstinada negación de ver la cruda realidad y una memoria histórica maniquea y distorsionada.”
Paradójicamente ser progresista hoy es rechazar la idea de progreso como obsoleta y predicar la decadencia de Occidente y el apocalipsis del mundo mercantilizado, temas de la derecha fascistizante de otros tiempos.”“Por su incapacidad de crear un nuevo partido... el progresismo está obligado a apoyar alternativamente a los dos partidos mayoritarios... aunque de tanto en tanto, rompe esta rutina con la aparición de algún nuevo partido de trayectoria fugaz...” “El radicalismo y el peronismo son percibidos como progresistas cuando están en la oposición y reaccionarios cuando están en el poder... El progresismo, que nada aprende, repite eternamente los mismos errores...el engaño será siempre posible mientras existan quienes quieren ser engañados y necesitan engañarse a si mismos.”
6 comentarios:
Me acuerdo, Rubén, excelente. ¿Se viene realmente el cambio en el país? ¿No estaremos realmente dando cuenta, tal vez un poco tarde, de que si tiene el gusto, el color, el olor y la consistencia de la mierda lo más probable es que, lejos de ser dulce de leche repostero, se trate de mierda?
ruben, cada vez que mencionas a sebreli lo escribir mas. sebreli va con una l, no con dos. de nada.
(ah, muy bueno el articulo)
Gracias Cristian. Cuando tení razón, tení razón. Aunque no es excusa, se ve que hay muchos que se equivocan con lo mismo.
Pensar que era trostkysta...
Quiero ser menos pesimista que Luis; dos buenas palizas en el día de hoy pueden iniciar la cuenta regresiva para el kirchnerato. Por supuesto que para que eso empiece a suceder tenemos que empezar por avivarnos los idiotizados habitantes de este país.
No hay con que darle. El maistro VlogVis es un grande de verda', si no la gana, la empata
Publicar un comentario