Mientras el ministro Arslanián decía el domingo que la posibilidad de sufrir un homicidio en el Conurbano era un irrisorio 0,00000014, el vice jefe de gabinete Jorge Rivas fue asaltado a palazos y ahora está en coma.
Será esta la ocasión propicia para que el gobierno finalmente se expida sobre la inseguridad, o seguirán mandando a sus voceros para que deslicen teorías progresistas de pobreza-delincuencia. Quizá cuando sufran de lleno lo que es vivir la inseguridad estos señores se dignen aunque sea a hacer alguna mención y decidirse a actuar.
La verdad es muy fuerte el asalto, pero cuando me acuerdo de la lucha de clases de Arslanián no hago más que pensar que estos señores viven en un paraíso no asequible desde estos lares.
2 comentarios:
Lo que pasa es que la inseguridad es una sensación que pega fuerte.
El otro día vi por TV a un tipo gritando: "¡Y el Ministro dice que no hay inseguridad, dice que hay sensación! Bueno, que haga algo para que no haya sensación, porque ¡acá la gente se muere de la sensación!".
Ahí está: muertes hay, así que si no es la inseguridad es la sensación; bueno, que hagan algo contra la sensación.
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