No se si la (vi)Reina habrá tenido oportunidad de pasearse por el célebre Bal Harbour Shops, el célebre y exclusivo shopping de Miami. Hasta hoy seguramente podría haberlo recorrido, eligiendo en Gucci, Fendi, Hermes, todas marcas nacionales y populares que le encanta exhibir, sin que la molestaran mucho.
Desde hoy esa posibilidad me parece que se le va a hacer cuesta arriba, ya que parece que su nombre está en todos los testimonios del juicio que le siguen a Franklin Durán, proceso en el que de paso quedó en evidencia la red de corrupción de los "empresarios" chavistas, así que si se le ocurre asomar por aquellos lados la perseguiría la prensa.
La verdad que la imagen de la doña viene mejorando sensiblemente, desde que se reuniera con Hillary Clinton, el presidente mexicano, la Merkel... ahora asociada a los favores del Payaso Bolivariano, y con fuertes indicios de haber sido financiada por narcoempresarios asociados a los carteles mexicanos hay enormes progresos. A este paso, no la va a querer recibir ni Evo Morales, a pesar que el ekeko no mide en gastos a la hora de elegir amigos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario