20 de octubre de 2008

De la realidad al delirio. Una historia argentina.


Creo que fue en 1989, cuando hice el curso de la Escuela de Defensa, que tuve una agarrada brutal con uno de los docentes. El tipo -me parece que un brigadier- decía que la Argentina tenía una enorme superiorioridad técnica sobre Brasil, y mostraba como prueba que la Fábrica Militar de Aviones se había creado en 1927 mientras que Embraer sólo había aparecido en 1969.

Desde el fondo levanté la mano y le pregunté si tenía el dato de cuántos aviones había logrado vender la FMA (antes Dinfia) y cuántos Embraer, siendo que para esa época los brasileños reventaban el mercado de los aviones de transporte de tercer nivel con el Bandeirante. Para qué. Por poco me echan.

Con los años la cuestión respecto a las dos empresas se hizo más marcada. La FMA se emperró en fabricar el Pampa, con ingeniería comprada a Dornier y confiando en la Fuerza Aérea como principal si no único cliente. Embraer siguió apostando al mercado civil. Hoy una es apenas un taller de mantenimiento, la otra es la el primer exportador brasileño y la tercera empresa aeronáutica del mundo después de Boeing y Airbus. Claro, no falta el paspado que le echa la culpa a Menem del ocaso de la ex FMA, como si 40 años de divagues no hubieran servido para arrasar cualquier prestigio.

Vale la pena repasar un poco los origenes de la FMA y las pavadas que se le atravesaron en el camino, los sueños faraónicos, los proyectos trasnochados, que la llevaron a la virtual desaparición. De producir bajo licencia el Avro 504R Gosport, el Bristol F.2B y el Dewoitine D-21, pasó a los desarrollos propios del Instituto Aerotécnico , tal vez el más exitoso el famoso "Dele Dele" que mencioné hoy en un comentario en El Opinador y del que se construyeron mas de 200 unidades. El DL era un avión noble, de madera, y con un motor radial de construcción local (El Gaucho) que tuvo que reemplazarse por uno importado por sus bajas prestaciones.

Todo parecía casi lógico. Hasta que en 1947 llegó el delirio: con un diseñador escapado de la Francia de Vichy, apareció el Pulqui. Y tres años después con un fugado de la Alemania nazi, el Pulqui II. De golpe, tener un reactor made in casa era cuestión de dignidad nacional.

Después siguieron las alas Horten, y hasta un proyecto ridículo de un avión diseñado para transportar naranjas.

Desde el Pucará, su fracaso táctico y comercial, y la gris historia del Pampa, lo que sigue es historia reciente. Viene al caso para ejemplificar la mentalidad que sueña construir una superpotencia sin haber primero construíido un país.



( a propósito: la imagen del post representa la visión en la iconografía peronista del IA 37, que iba a equipar los escuadrones de la Fuerza Aérea de la Nueva Argentina. Apenas voló un prototipo. Y sin motor)


Post dedicado a Luis, uno que pelea contra el delirio cotidiano.

10 comentarios:

Carlos dijo...

La Argentina es el país de la desmesura (hibrys) que no perdonaban los dioses griegos.

Cogito Argentum dijo...

sonamos! ahora a Carlos se le da por imitar a Mariano

Louis Cyphre dijo...

Muy inteersante, Rubén.

Yo honestamente tengo serias dificultades para entenderlo. Te digo en serio, a veces creo que los que estamos mal somos nosotros. No puede ser que todo un país se empecine en vivir en una nube de gas intestinal.

Anónimo dijo...

Si lo pensas un poco los milicos y los progres se tocan bastante en la fantochada de que el deseo es realidad. Patrioterismo barato.

El enmascarado) dijo...

¡Muy buen Post, Rubén! Temo que la gran diferencia entre Brasil y Argentina es que Brasil tiene vocación de grandeza y nosotros tenemos delirios de grandeza.
Es muy triste.

Gerardo Sapag dijo...

Mas alla del evidente fracaso en desarrollar un producto exitoso, el tema es el conocimiento.
Seguramente todos los paises del mundo tienen aunque sea un pequeño departamento dedicado a acumulacion de conocimiento aeroespacial teorico y empirico. Ese conocimiento es aplicable a cientos de areas, sin relacion aparente con el desarrollo de aviones necesariamente.
Sin pretender un paralelismo, observemos la Industria Aeroespacial Israeli. Años, decadas, sirviendo de simple estructura para servicios y soporte de cualquier maquinaria adquirida. Manteniendo primero, modificando luego y adaptando vehiculos y equipos a sus necesidades.
Luego de decadas de acumulacion de conocimientos, sin ningun producto comercial exitoso en ventas en todo ese tiempo, recien se comienza con desarrollos propios. Pero para eso necesitaron continuidad, obtenida en su caso debido a su particular situacion, obviamente.

Sergio F dijo...

Con algo menos de delirio de grandeza, la empresa chilena Enaer ha imitado de Brasil sólo el nombre, para guiarse por Argentina en lo referente a casi todo lo demás, con los resultados a la vista: Piper Dakota al que se le hacen cambios cosméticos y se lo llama Pillán (se exportó, eso sí, a dos o tres países, incluyendo España; es "el" éxito exportador aeronáutico chileno), un ultraliviano (Ñamcú), y el fracasado proyecto del A37 Halcón, que es un entrenador CASA al que en Chile convirtieron an avión de ataque. Resultado, tiene que irse y ahora la FACH compra Tucanos turbohélice de entrenamiento (humildad ante todo).

Creo que hay trabajos en conjunto con Embraer y Aermacchi para la producción de partes de un avión, no sé cuál, y también me parece que Enaer hace un trabajo sólido en mantenimiento y producción de componentes. Según comentaban en un foro de defensa hace ya un año, Chile fabrica algunos componentes del F-16 como parte del paquete de compra de diez unidades nuevas a Estados Unidos, pero nada de esto me consta. Lo que sí me consta es que es loable tener las ganas y el empuje de crear una empresa aeronáutica. Sin embargo, en nuestro barrio se mira en menos el trabajo de hormiga. Queremos buenas universidades mientras las escuelas básicas se caen a pedazos y los profesores no saben las materias que enseñan. Queremos fabricar aviones pero no tenemos la línea logística que sostendrá a la fábrica de aviones. Esa línea logística se crea de a poco y con trabajo de hormiga. Argentina sufre este problema mucho más que Chile (con más razón también, dado el pasado de ambas naciones y las expectativas argentinas nada descabelladas de ser una gran nación), pero está presente en el vecindario. He leído opiniones serias de colombianos y peruanos con respecto a desarrollar "su" industria aeronática ya. No hablan de desarrollar el medio para que la gente cree negocios, de que las leyes ayuden (y sean pocas) en vez de impedir al progreso, de que haya reglas claras, etc. No. Ellos hablan de aviones y misiles y helicópteros. Delirios sobran y así estamos como estamos.

Forbidden Reloaded dijo...

Siguiendo con las reglas del blog voy a dar mi humilde punto de vista como aporte al debate. No me extraña la respuesta del brigadier, entra en la lógica "futbolística" con que piensan los argentinos que enfrentan argumentos emocionales con racionales. Evidentemente si hiciste la Escuela de Defensa algo debés saber del tema. Creo que acá hay tres cosas distintas, una el aspecto ideológico, otro el técnico de la FMA y el otro el comercial.

En el aspecto ideológico, como ya dicen las reglas de tu blog no voy a intentar convencerlos, pero aunque peronista, tengo la mente lo suficientemente abierta para leer Blog Bis y sacar las muchas cosas buenas que tiene. El tema pasa cuando al ideología y los prejuicios te impiden ser medianamente objetivo.

El segundo aspecto el técnico, acá disiento con vos. Tanto el “Narajero” que no se de dónde sacas que era para transportar naranjas, como el Pulqui II eran proyectos viables y que además no los inventamos nosotros. Acá creo te entra un poco el prejuicio de decir que fueron proyectos alemanes y desarrollos peronistas. Pero para la misma fecha los norteamericanos tenían sus proyectos de ala volante y no tuvieron problemas de reclutar científicos alemanes como Von Braun o los japoneses expertos en armas biológicas (probadas en seres humanos) de Harbin (Unidad 731), que nunca fueron juzgados por crímenes de guerra. Sobre la viabilidad del ala volante tenemos ejemplos actuales como podrían ser el B2 o el F 117. Sobre el Pulqui II derivado del Ta 183 que el diseño era viable lo demuestran el Mig 15 o el Ouragan. Lo que faltó tal vez fue experimentación de los prototipos, y que si la revolución libertadora no se hubiera empeñado en destruir lo bueno y lo malo del peronismo hoy otra sería la historia. Pero bueno, prefirieron los Sabre de segunda mano. Embraer si bien es el tercer productor de aviones de transporte comerciales también produce aviones militares el Tucano, bastante exitoso y el AMX junto a Italia, que solo lo compraron esos países, por lo que no veo que fuera precisamente un éxito pero igual lo fabricaron, vos deberías saber, como egresado de la Escuela de Defensa que muchas veces las exigencias estratégicas dan pérdidas y no se rigen por las reglas del mercado. Por lo menos al Pucará lo compraron Colombia y Uruguay. Y respecto a este último, si hubiera sido tan malo los británicos no le hubieran asignado al SAS la misión de destruirlos en tierra en Isla Borbón, arriesgando la vida de sus fuerzas especiales, simplemente los hubieran derribado en vuelo. Como conclusión creo que teníamos buena tecnología el problema fue que, como en el caso del Condor, hubo otros intereses que no la dejaron evolucionar. O sea es mejor comprar un Sabre, un A4, un Mirage o un Hércules que tener un Pulqui o un Narajero. A pesar de que si después no seguís sumisamente las políticas de quien te los vende te cortan el suministro de repuestos (En Malvinas Sidewinders – Exocet – repuestos de aeronaves, por suerte estaban los peruanos, etc etc)

En el aspecto comercial, creo que nunca fuimos habilidosos, lo que pasó con el Pampa, pasó con el TAM, que en su momento llegó a ser mejor que los modelos básicos del M 60 o el Leopard I. Ni los militares ni Alfonsín quisieron venderlo a otros países por ser “Amantes de la Paz” , dejando que la ideología interfiriera con cuestiones comerciales y el interés nacional, en ese sentido tenemos lo que nos merecemos. Es mas cuando quisimos dejar de lado la ideología y concentrarnos en el mercado fuimos tan desprolijos que produjo un escándalo, por ejemplo armas a Ecuador y a Croacia, aunque me queda la duda si no las vendimos siguiendo instrucciones de los vendedores de Sabres....

Espero haber cumplido con todas las normas impuestas por BlogBis para que mi comentario no sea borrado. Desde ya les aclaro que he tratado de no ofender a nadie, ni de cambiarles su forma de pensar, ahora si no les gusta lo que escribo tienen dos opciones una contestarme, la otra borrarme, y en ese caso ya estarían mas cerca de Cabandié de lo que podría imaginar.

Saludos

BlogBis dijo...

Forbiden, así me gustan los comentasrios. Después, con tiempo vuelvo sobre tus argumentos

Anónimo dijo...

gracias por: http://ratak-monodosico.tumblr.com/post/36279339157