Como no podía desperdiciar la visita de Calderón para volver a demostrar que vive en una irrealidad absoluta, la (vi)reina botóxica le ofreció al presidente mexicano la colaboración argentina en el combate al narcotráfico.
Siendo que la oferta llega justo cuando está a la vista que la justicia argentina no tiene la menor idea de para dónde disparar con el asunto de la efedrina vendida a los carteles mexicanos para la fabricación de drogas de diseño, y cuando México ha empeñado a todos sus cuerpos policiales y las fuerzas armadas para combatir a los narcos, sería mejor que la doña guardara un respetuoso silencio. Con estupideces como esta confirma que su encierro no es como dice Susana Viau en un bunker, sino en un frasco de yogur.
1 comentario:
Que mala onda, ella ya tenia un plan maestro, anterior a la llegada de Calderón, había infiltrado a un pibe que colaboro con la campaña, para que los embarques de efedrina los cambiara por sal de mesa, de ahí a la debacle del narconegocio mexicano un pasito. Sforza se llamaba el pibe, se murió causas naturales, sobredosis de plomo.
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