Hoy a la tarde estuve en el partido entre un combinado rosarino (no es la selección, porque había un par de jugadores de clubes de exterior) contra el Barbarian Rugby Club, que terminó con vitoria de los franceses 54 a 30. En el primer tiempo los rosarinos -mayormente amateurs- cerraron con ventaja, pero en el segundo tiempo los franceses (all-pro) hicieron valer la diferencia en físico y en estado para literalmente pasarlos por arriba.
Creo que el rugby argentino está muy, muy lejos del nivel que tienen estos tipos. No va a ser nada fácil insertarlo en el juego internacional. Aún si la semana que viene los Pumas dejan de cama a este equipo invitación, la brecha es enorme.
1 comentario:
Estamos lejos, basta ver por Tv lo que son los partidos en Gran Bretaña o Francia. De todas maneras, lo que se ha avanzado es enorme. No me perdí ninguna gira de selecciones extranjeras en los '60; las palizas que le daban a nuestro selecciónado eran increíbles y hasta una selección de Oxford-Cambridge les pasó por arriba con facilidad. La cosa empezó a cambiar con la gira a Sud Africa. El rugby era cosa de clubs y de colegios y los partidos internacionales se jugaban en la sección Jorge Newbery de Gimnasia y Esgrima que es una canchita para no más de 5000 espectadores.
Tengo recuerdos imborrables de esa época, los tardes de partido en el CASI, Belgrano, Olivos, San Fernando...el tercer tiempo, las fiestas...
Había otro espíritu propio del total amateurismo; lo mismo pasa con el polo que ha ganado en desarrollo pero, desde que entró el negocio, dejó de ser el de las finales de El Trébol y Venado Tuerto de mi infancia.
Nostalgia, que le dicen.
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