22 de octubre de 2009

"Los jueces no nos salvarán"

Mientras el mensaje que reciban los inversores del “último escalón de defensa de los derechos” (esto es, la Justicia) sea que no tienen soberanía sobre su propiedad, no vendrán al país y los que están se irán. Es así de sencillo. Si la ley y la Justicia argentinas no pueden asegurar que el dueño de un lugar tiene pleno derecho de admisión sobre su propiedad y que el único “supremo” frente a su picaporte es él, entonces la pobreza terminara por entronizarse en el país.

¿De dónde surge que el dueño de un inmueble debe hospedar en su interior a personas que considera indeseables?, ¿de dónde surge que el dueño de casa deba dar cobijo a quien lo sabotea y al que usa sus propias instalaciones para arruinarlas y como bastión propio de una guerra idiota?

“De la ley”, se me dirá. “El empleador no puede echar a los delegados”, agregarán para más datos. Pues bien esa ley está mal. Esta mal no solo porque es groseramente inconstitucional, sino porque está en contra del orden cósmico del Universo.

La ley podrá decir que si la empresa quiere deshacerse de determinados empleados que ejercen funciones sindicales deberá pagar una suma diferente de indemnización, más cara, por supuesto, para que el derecho gremial tenga posibilidades de funcionar.

Obviamente el excedente entre la indemnización normal y la indemnización “gremial” no debería ir para el empleado despedido sino para el sindicato al que pertenece, para que esa persona no usufructúe la representación de sus compañeros para beneficio personal. Pero de allí a decir que la ley o un juez me va a obligar a recibir en mi casa a quien no quiero, hay una distancia como de aquí a Plutón.

Señores Jueces y ‘Señora’ Ley, a ver si soy claro: yo en mi casa hago lo que quiero, ¿lo entendieron?; ninguno de ustedes me va a obligar a compartir un techo con quien no se me da la gana; con quien utiliza mis propias instalaciones para perjudicarme y para intentar robar mi propiedad.

Carlos Mira

1 comentario:

raúl dijo...

Carlos Mira siempre brillante. Lo escuchè en radio El Mundo hace 2 o 3 dìas, hablando de este tema.