31 de diciembre de 2009

Ruaj Ha Kodesh


Siendo pequeña percibí nítidamente y por primera vez el aliento de Di-s, por medio de una experiencia extraordinaria y fantástica, pero eso hace mucho ya se los conté.
En ese momento me dí cuenta que yo debía ser únicamente su delicia, y para siempre.
...
Bueno, a Di-s yo lo siento todo el tiempo.

Yekhezqe’l 27:4

En el corazón de las mares están tus términos: los que te edificaron completaron tu belleza.
belêbh yammiym gebhulâyikh bonayikh kâlelu yophyêkh
בלב ימים גבוליך בניך כללו יפיך