26 de noviembre de 2011

Al fin mi perro cazó una mosca

(Some assembly required)

En los últimos días llegaron a la Argentina tanto los dos helicópteros Mil Mi-171 comprados en Rusia para que la Fuerza Aérea los use en la Antártida, como los primeros dos de los cinco Bell 206 que el Ejército encargó en EE.UU. para el curso conjunto de pilotos de helicópteros.

Mientras tanto, la compra de los veintitantos helicópteros Agusta-Bell AB-206 italianos ex Carabinieri para el Ejército parece estar en un compás de espera mientras se definen los devaneos de FADEA (la ex Fábrica Militar de Aviones) con la presunta fabricación de helicópteros chinos que el propio Ejército rebotó hace cuatro años.

En cuanto a esto último, se comenta en los foros que la reedición del cuento chino de los helicópteros contaría en esta oportunidad con la entusiasta venia de Eurocopter, la diseñadora original del modelo Ecureuil cuya copia pirata china (el Z-11) Garré quiso engancharle a las FF.AA. en 2007.

Algo es algo en estos tiempos de malaria, supongo. Vamos cuatro y faltan sólo trece más para compensar las diecisiete aeronaves militares que se vinieron abajo durante el Pingüinato.

Quizás algún día, si la suerte nos sonríe y los planetas están en horangélica alineación, terminan comprando algo que haga "pum".

De yapa: un chistecito que sacó Perfil en ocasión del recule kirchneriano con el tema de los controladores aéreos y que se me pasó de subir acá vaya uno a saber por qué.


1 comentario:

BlogBis dijo...

Lo del helicóptero chino que dejó de ser pirata para tener el aval de Eurocopter es de-pe-lí-cu-la