17 de enero de 2010

Dégringolade

"No es fácil encontrar la palabra justa para calificar las vicisitudes más recientes de la cada vez más accidentada gestión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Tal vez la más expresiva sea la francesa "dégringolade"; la emplean los galos y sus admiradores cuando todo parece venirse abajo, un desacierto lleva a otro y cunde el malestar hasta que un día la sociedad se entera de que se ha equivocado de rumbo al internarse en un callejón sin salida, o sea, en un impasse.
(...)
Parecería que todo queda en manos de un puñado de personas, lo que los norteamericanos llaman "un gabinete de cocina", conformado por la presidenta y su cónyuge que, desde luego, siempre tiene la palabra final, además, es de suponer, del secretario de Legal y Técnica Carlos Zannini y el infaltable secretario de Comercio Guillermo Moreno. Para juristas y constitucionalistas vinculados con distintas facciones opositoras, los decretos improvisados por este equipo están tan atestados de errores de todo tipo que sería utópico hablar del imperio de la ley.
(...)
Aunque las denuncias fogosas en tal sentido que formulan Cristina, Néstor, Amado Boudou y otros personajes no ayudan a aclarar lo que está sucediendo en el país, sí echan luz sobre el estado mental de los principales miembros del gobierno. Están desesperados. "

Precisa, como siempre, columna de James Neilson. Completa, acá.

4 comentarios:

Carlos dijo...

Impecable, como de costumbre.
Creo que, contrariamente a varios colegas, Nielson no defiende intereses políticos ni se aferra a dictados ideológicos; eso hace que sus análisis sean muy lúcidos.

Sine Metu dijo...

Y lo que es más importante, Neilson no descubre la verdadera cara del kirchnerismo ahora. Los viene desenmascarando desde 2003

Pablito dijo...

El matrimonio y su entorno aunque no lo admitan- estan dominados por el terror a un final como el de De La Rúa , por eso se sienten obligados a sobreactuar su inflexibilidad, para que no sea interpretada como debilidad.

En su caída arrastrarán a la izquierda fundamentalista, soñadora de la revolución, que se va a dar cuenta -tarde-, que quedó pegada a una banda de chorros.

BlogBis dijo...

Sobre lo que dice Pablito, no se si vieron a la impresentable Diana Conti, diciendo que a los K no son de los que se rajan en helicóptero.

Deben estar sintiendo ya el ruido de los rotores.