20 de abril de 2011

La Democracia Cristiana quiere ser el Partido Comunista



Antes del affaire van Rysselberghe, tenía pensado escribir sobre los demócrata cristianos y el indulto, a raíz de una columna que escribió el abogado, Jorge Navarrete y las declaraciones que realizó el alcalde, Claudio Orrego, negándose a darle el indulto a los militares. El indulto masivo es para descongestionar las cárceles. Sin embargo, antes de emprender tal cometido, quisiera cerrar por el momento el asunto de la ex Intendenta. En efecto, el fin de semana, el presidente de Renovación Nacional (RN) y actualmente senador, dijo en una entrevista en ‘La Segunda’: “En el tema Van Rysselberghe, el Presidente comprendió que RN le estaba ayudando a resolver el problema de la VIII Región. El tenía esta defensa cerrada de la UDI, que nunca pierde un centímetro de influencia en el poder político —definición número uno en la mentalidad de nuestros socios—, y yo le estaba facilitando la operación para que se pudiera dirigir a ella y decirle “tengo otro socio, RN, que procura un cambio en la forma de gobierno de la VIII”. A fin de cuentas, todo se reducía quitarle el terreno y legitimidad a un liderazgo que se forjó en la comuna de Concepción, ganando elecciones limpiamente. Las palabras claves son “que nunca pierde un centímetro de influencia en el poder político”. Hasta parece una frase sacada de los libros del pensador y político italiano, Antonio Gramsci, que hablaba como si la sociedad civil fuesen una serie de fortalezas que hay que conquistar.

Si lo vemos en retrospectiva, la derecha ha perdido ‘la guerra cultural’. Y ni siquiera se han atrevido apoderarse de las tribunas de los derechos humanos, dejando al descubierto los sesgados, arbitrarios y hasta déspotas que son los representantes de esos derechos. Un ejemplo de lo que hablo, es que en el diario ‘La Tercera’, se quejaba el abogado José Francisco García de que: “He aquí el centro de la cuestión: Montesquieu ha muerto, los chilenos lo hemos matado…. del fenómeno de la constitucionalización del derecho y la idea de que ciertos valores y principios deben tener primacía respecto de las reglas y decisiones del legislador”. Lo que ha llevado a que "así se explican fallos del Tribunal Constitucional en materias relevantes, como la "píldora del día después" o las isapres, o bien la figura del "secuestro permanente" como sustituto a la aplicación de la Ley de Amnistía por parte de la Corte Suprema”. Nótese que los constitucionalistas se ponen más allá de lo que dice la Constitución y la ley. Es como la organización Amnistía Internacional. Amnistía significa olvido, pero a ellos no quieren olvidar. Hay que olvidar los crímenes de la izquierda. El progresismo retuerce las palabras al mismo estilo orweliano.

Ahora bien, antes del affaire van Rysselberghe, el alcalde de Peñalolén, el abogado, Claudio Orrego pariente del filósofo conservador y Opus Dei, Cristóbal Orrego, dijo por la prensa , cuando se reunió con la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD) junto con los otros líderes de la Concertación: "en su pretexto de disminuir el hacinamiento que hay en las cárceles chilenas, pretenda cumplir con compromisos desconocidos, raros, oscuros con el mundo de los militares en retiro, respecto de los violadores de los derechos humanos”. La negrilla es mía. Nótese que habla de “compromisos desconocidos, raros, oscuros”. Dichos compromisos no son desconocidos, raros y oscuros, pues durante la campaña el entonces candidato se conjunto con los militares en retiro en el Club Español y en Viña del Mar, respectivamente. El círculo cercano de la campaña a Sebastián Piñera no quiso darlo a conocer a la prensa. Por eso, fueron los propios militares en retiro y civiles quienes anunciaron a los medios la reunión. A la semana siguiente, el ex candidato se retractó de su compromiso en un foro entre presidenciables. Además, el video que los medios chilenos o la televisión abierta que no ha difundido se encuentra en Youtube. Naturalmente, la prensa no hizo su trabajo, ya que les hubieran preguntado de los indultos a los terroristas que realizó, el DC Patricio Aylwin Azócar en 1990. Los historiadores y periodistas podrían indagar los compromisos raros y oscuros que hizo la Democracia Cristiana con la izquierda y la extrema izquierda. Al contrario de lo que escribió el filósofo conservador Orrego hace como un año del alcalde de Peñalolén, que él podría salvar a la Concertación por ser joven, etc, con su declaración de negarle el indulto a los militares, confirma lo dije hace tiempo, que la juventud no es garantía de mejor, si repite los eslóganes de la izquierda, aun cuando haya nacido después del plebiscito y de la caída del Muro de Berlín.

Luego de esa declaración de Orrego y de Patricio Walker , se sumó la opinión del abogado, Jorge Navarrete en ‘La Tercera’ con su columna: ‘No nos convirtieron en ellos’. Jorge dice: “Muchos de los que hoy reivindican la igualdad ante la ley, para que en definitiva se atienda la situación de ex militares condenados por graves violaciones a los derechos humanos, son los mismos que ayer desconocieron ese derecho a sus adversarios, sea participando directamente en la dictadura, justificando lo ocurrido o simplemente negándolo”. Después cita al poeta Jorge Gelma. No sé si alguien docto como Navarrete sabrá que Gelman fue un terrorista. Luego agrega: “Pero es justamente ahí donde estriba la diferencia. Me asiste la convicción de que la lucha para recuperar la democracia estuvo iluminada por un profundo sentido de libertad y justicia; dos pilares fundamentales de una concepción humanista que ahora se pone a prueba. Es justamente la capacidad de compadecernos lo que nos diferencia de aquellos criminales que ocuparon el aparato público para eliminar a sus adversarios”. O sea, el razonamiento del abogado, porque unos hicieron una cosa, nosotros haremos los mismo. Repite el coro de la izquierda. ¿Por qué no habla de terroristas? Sólo falta que diga que fueron perseguidos por pensar distinto. Así nunca vamos a romper el círculo de odio, tal como lo hizo Mandela en Sudáfrica. Dudo que entienda en ‘Invictus’. Eso no es justicia, ni tampoco respetar el Estado de Derecho. La libertad que tanto se ufana es producto del Gobierno Militar, pues gracias a la institucionalidad, tenemos los diques que nos defienden de las tentaciones colectivistas de la Democracia Cristiana y el socialismo. Después de todo, la DC chilena le pavimentó el camino al totalitarismo, cuando eliminó las garantías constitucionales a la propiedad privada, que tenía la Constitución del 1925.

Pensé que nadie le respondería al abogado. En la semana, sin embargo, el ex comandante de la Armada, el almirante Miguel A. Vergara Villalobos, le respondió y tuvieron un intercambio epistolar en ‘La Tercera’.Si alguien desea ver el epistolario, lo puede buscar en google bajo el nombre ‘Pasado y superioridad moral’.

Al abogado le remuerde que su padre, el productor de televisión, Jorge Navarrete, haya apoyado el Gobierno Militar en un principio como tantos DC. Tanto Navarrete como Orrego y Walker tiene que explicar los indultos de Aylwin a los terroristas. Quizás, las tres luminarias de la DC, estén esperando que el actual Papa Benedicto XVI saque una encíclica en que justifique desde el punto de vista de la teología la expresión que tanto le gusta a la zurdería chilena ‘Ni perdón ni olvido’. La base del cristianismo es el perdón.

A Sebastián Piñera le sacan en cara que él se opuso al indulto del narcotraficante que hizo el DC, Eduardo Frei Tagle. Más nadie se acuerda que el actual Presidente de la República estuvo de acuerdo con los indultos a terroristas que realizó la primera presidente de la Concertación.

Recientemente conocí a un ex demócrata cristiano de la misma promoción de mi padre en la Escuela Naval, esto es, de 1958. Su apellido es Pizarro. Era el máximo representante de la DC en la comuna de La Florida durante la Unidad Popular, donde aún vive. Se retiró joven de la marina y después entró a trabajar a Chilelectra en el área de recursos humanos. Antes de que se privatizará, él les contó a los gerentes de la época, que en esa empresa estatal los sueldos no podía ser iguales, porque la compañía tenía tres divisiones: generar electricidad, repartirla y no recuerdo la tercera. El señor Pizarro que no parecía militar por su manera de expresarse, estaba orgulloso, porque él se había adelantado a la privatización. Él conoce a todos los DC. Si alguien piensa que el actual presidente de ese partido, Ignacio Walker es alguien, para el señor Juan Pizarro no es nadie. Haré un comentario clasista. A los líderes de la derecha les cae bien Ignacio, porque tiene pinta de gente linda.

En fin, la DC quiere ser PC.

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