Yo obviamente no tengo recuerdo alguno sobre el Banco de Desarrollo o BANADE, pero mi viejo me dijo que era algo así como un banco para los amigos donde después nadie pagaba nada. Entonces cada vez que escuchó a los industriales hablar de que necesitan nuevamente un banco de este estilo para poder financiar su inversión de largo plazo, se me viene a la mente la imagen de lo que me contó mi viejo y la misma se escurece cada vez más cuando pienso en la clase de gobierno que es este.
Peirano era el enclave para poder lograr este en el mediano plazo, ya que este señor es un hombre del seno de la UIA y siempre habló del banco. Ayer
Alberto Fernandez volvió a repetir la promesa de que se creará un nuevo banco de desarrollo, pero que según sus palabras no tendrá el triste final del BANADE. A su vez Martín Redrado dijo que algunos países de latinoamérica las AFJP financian la inversión mientras que este país se reduce a un magro margen, y que las aseguradoras poseen mucha liquidez para lanzarse a la inversión.
Verdaderamente no creo que el Estado deba utilizar los dineros de todos los ciudadanos para financiar actividades privadas que nada tiene que ver con el bien común, ni se condicen con sus funciones originarias. Ni tampoco andar amenazando en forma sigilosa a las AFJPs y a los dineros de los jubilados de mandarlas por la fuerza a la
inversión productiva si éstas no lo desean. Es raro que estas malditas empresas inviertan en Brasil y no lo quieran hacer en este país, quizá deberían pasarle algún escrito de Moreno que les muestre mejor el panorama.
La inflación imposibilita el crédito a largo plazo que tanto piden los industriales, por eso el gobierno debería empezar por controlarla para generar ese crédito tan pedido. Y no creerse que trucando los datos del INDEC nos salvamos todos, ya que es un fraude total a las AFJPs y nos hace pagar
cada vez más intereses por la desconfianza que genera.